A los mares a los que combatir sin tregua
entre rumbos que tomar sin más que tu propio deseo,
cabos que doblar cuando todo lo demás ya no exista
y tu estela se pierda engullida en montañas de agua.
A tantos Destinos sobre mis dos sonrisas expectantes
que permanecen sin tacha ni falsos besos mutantes
cuando la lluvia gris trate de pintarse en tu corazón.
Sinceras sonrisas liberadoras sobre el nácar de sus
dientes.
A tu Tinta para unos versos que se apagan sin ella,
elixir virtual donde una gota es océano,
mar de certeza donde las dudas de ahogan en una botella
como mensaje para
recordar lo que vale su láudano
sin otro destino que su
ingesta hasta su retorno insobornable
en el que mi
corazón palpita de nuevo por sentir el
aire sin mas huella
que las siete letras
soñadas y pintadas sobre el costado de mi nave.
“Siempre”
Echar de menos no es
querer lo que no se tiene,
echar de menos no es llorar por lo perdido,
echar de menos es solo recordar lo que deseas
para cazarlo como el viento en las alas de tu navío,
para volver a ganar las millas de bien en tu navegar
sin que la noche te despierte gris al alba de su rocío.
2 comentarios:
Echar de menos es notar la falta de lo que te hace bien cuando no lo tienes. Como lo que escribes. Se echaba de menos...
Gran alegría al entrar en estas páginas. Vengo aquí porque estaba buscando un texto de mi blog (Venia ego) donde hablaba de la saudade. Una de mis primeras entradas. Es para un amigo de Brasil, tierra a la que echo de menos. Y me encontré un comentario tuyo allí.
http://jlmartinezhens.blogspot.com.es/2008/04/mar-adentro-de-caballero-bonald.html
Y me encuentro esta maravilla de entrada y de blog. Veo que tu barco va por buen rumbo y me alegro Blas.
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