¿Servirá de algo hablar frente a la pared?. ¿Será cierto aquello de hay otros mundos pero estan en este?. Creo que lo primero no es cierto y que lo segundo es un dogma que no precisa fe.
Puedes tener fe en que el Sol alumbra a todos por igual, (vaya pesado que estoy con esto del Sol), pero eso no dejará de permitir que haya gente entre rejas que no lo perciba, o enfermos en hospitales añorando sus quemaduras, hasta algún vampiro cojo refugiado entre los ladrillos de una verde colina que el sol la convertiría en polvo poblado de isótopos radiactivos desearía un rayito.
¿Será el sol redondo de verdad?, quizá uno de esos rayos invisibles , rebosantes de luz incolora nos golpee de una vez la cabeza. Testa, que de tanto pensar se ha desgranado como una mazorca en tremendas motas de colores. Rojo de odio y amor eterno sobre algo o alguien. Negro de la ponzoña que conforma la envidia sobre el impotente y, como en el espacio, todo lo quiere para sí. Azul del color de los sueños, ¿o quizá verde? del de los que sonríen al ver las primeras luces al fondo del tunel.
El sol debe de ser redondo, si, pero será el que lo tome entre sus brazos el que de verdad lo certifique mientras se funda en él para la eternidad.
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