domingo, 4 de octubre de 2009

Polvo en el Viento.


Polvo que lleva el viento desde lejanas arenas del desierto
formando nubes que aturden el pensamiento fugaz
dando paso al recuerdo que de borrar se siente incapaz
sobre la piel tiznada por su impronta antes de ver su ánimo muerto.

Olvida su viejo talismán perdido sin remedio en el marasmo moral
que la vista del humano temporal le asola con solo observar
tiempos perdidos en viejas batallas por razones que ha de olvidar
aunque la trinchera se aferre sobre su parálisis de manera brutal.


Gris amanece bajo la nube del polvo que impávido permanece,
su alma no encuentra calma que la devuelva al camino
de alambradas sembrado dejando alma y vida con incierto destino.

Días de oro pasados, por más que deseados ya solo recordados
cartas en su tinta corrida por muchas más veces imaginada
mientras sus lágrimas son ya rio salado junto a las de los otros soldados.









¿Por qué todo sigue igual? Por qué nos enfrentan sin un ápice de vergüenza entre los pliegues de sus impolutas chaquetas. Políticos, religiosos, mil banderas que sin las otras nada podrían significar.


¿Por su propio y oneroso bienestar, quizá? Todo ello perfectamente disfrazado entre patrias, cruces, medias lunas, derechos de igualdad que mantienen en exclusiva la suya entre las migajas de la nuestra. Ya lo dijo Sylvain Marechal con Babeuf a la cabeza en su manifiesto en el que a nadie perdonaba (1797): "... Siempre y en todas partes la pobre especie humana confiada a antropófagos más o menos hábiles sirvió de juguete de todas las ambiciones, de pasto de todas las tiranías. Siempre y en todas partes se adormeció a los hombres con bellas expresiones: nunca y en ningún lugar obtuvieron, junto a la palabra, la cosa..."


Todo sigue igual. Por eso debemos cambiarlo. Antes de que Átropos corte el hilo que nos permite razonar.

7 comentarios:

Anónimo dijo...

Ojalá no sea una utopía...Ojalá podamos hacer algo para cambiarlo....Ojalá....

Alfonso Saborido dijo...

Cambia, todo cambia... :(

Anónimo dijo...

Intentaremos cambiarlo, y que los que vienen detrás no dejen tampoco de hacerlo.

Armida Leticia dijo...

Yo creo que es muy difícil que las cosas cambien, pero vale la pena intentarlo. Dust in the wind, es de mis canciones favoritas.

Saludos desde México.

lola dijo...

Hola Blas, agradezco tu visita a mi blog, yo creo que si no empezamos por preocuparnos por cambiar el curso de las cosas, para luego ocuparnos, obvio que nada va a cambiar, los cambios se dan poco a poco, asi es que debemos tener la esperanza de que algo sucederá.

Me gusta la pieza musical seleccionada.
Un fuerte abrazo.

SOMMER dijo...

Todo sigue igual, querido amigo, precisamente porque las chaquetas con corbata no razonan...

Alicia María dijo...

Mientras todo sigue igual.
Algo debemos hacer ¿Comenzamos ya mismo?
Te dejo un abrazo.
Placer visitarte.
Alicia