miércoles, 30 de diciembre de 2009

Tenemos, tendremos


Mas de cien razones, como cien vendavales

que pasan solos o unidos, en años con días y meses

bajo inclementes aguaceros en interminables lluvias

de vida trufada por rayos cabalgando a lomos de viles tormentas,

aturdiendo tu vista de avezado piloto en la vieja travesía vital

sobre la que hundes con firmeza el filo del tajamar.




Alma que nunca habrás de vender sin en verdad deseas triunfar

frente a quien como el viejo corcho usado tan solo pretende flotar,

acaba este año como un momento, pura copia de los que vendrán

buscando la mirada perdida que dejaste entre aquellas pupilas soñadas

que devuelvan tal sueño con mil palabras por tal alma añadidas.



Sueña, vive, corre y no dejes de volar triunfante ante el viejo Isaac,

sobrevuela sin pudor sobre lo que siempre deseaste alcanzar,

evitando que sea lo nuevo más que lo viejo si no es de verdad.

Achica el agua de los males que inundan el combés de tu ánimo

y destrinca cables y cabos que jamás sabrán otra cosa que amarrar

pues de la tierra serena nada vieron y de la mar por surcar nada desean mirar.



Hay esquinas que doblar, bares en los que entrar, palabras que escuchar,

mil y una mentiras que volver a encontrar

para seguir percibiendo la vida por la que poder bregar.







Buen incio de singladura, Ilusión, confianza y mucho ánimo a todos.

Blas, el de Lezo

3 comentarios:

Anónimo dijo...

La ilusión nunca se pierde. Que siempre tengas un buen faro en la costa, para que atraques con seguridad. Un abrazo, Blas.

Anónimo dijo...

Te deseo lo mejor. No pierdas de vista los sueños, que siempre llevan por buen camino.

Besos.

Alfonso Saborido dijo...

Y a navegar, que no perdamos nuestros rumbos. Feliz año para ti y las personas que amas :)