miércoles, 17 de octubre de 2007

Pesadillas

Sueños injustos entre pliegues de sábanas
lágrimas gratuitas por afrentas vacías.
Cae la noche, debe ser la amarga luna
que oculta la razón desviando la luz.

Órbitas elípticas sobre centros fugaces
anulan la vista si hacia el mismo apuntas,
fuerzas centrípetas que luchan a muerte
contra fuerzas centrífugas que odian la mente.

Equilibrio inestable sobre tu almohada
la cabeza violenta se mueve entre trazos
del sudor frío que persigue las lágrimas
hasta unirse como salado río sobre la ardiente piel.

Ruidos estridentes como un pronto abren tus ojos
de flagrantes ojeras acampadas bajo sus cavas
mientras, el pálpito no se acelera tras la primera tos.

Todo te sabe duro, rancio, no sabes por qué
el cansancio insinúa maldad.
Mientras el día se perfila gris, sin fe
solo deseas volver, dormir, luchar contra ese sueño en verdadera igualdad.

A mi eterna y oculta inspiración

5 comentarios:

Anónimo dijo...

La abundacia de sueños se paga con el aumento de pesadillas...

Anónimo dijo...

Gracias por la dedicatoria, gracias por ser como eres y mil gracias por estar SIEMPRE.

Marina

Los amantes de la poesía dijo...

No, no se descansa cuando uno tiene pesadillas :-(

Alicia Abatilli dijo...

A las noches de pesadillas frías la colman mañanas que prometen esperanza.
Así verás.
Un gusto leerte.
Alicia

Gala dijo...

gracias a vos por la buena onda :) Y... que tema España, que Gala vuelve pronto!!!